Tras La Puerta de Alcalá y muy próximo al Retiro, en el barrio de Salamanca hay un lugar donde Madrid es menos ciudad: de la cocina salen platos elaborados con ingredientes de la huerta; el trato de los propietarios es de lo más cercano y todas las edades convergen a modo de gran familia. Todo ello en un espacio de ensueño, donde la decoración y las antigüedades ocupan un lugar especial en el denominado “organic café & antique market”: Il Tavolo Verde.
Al cruzar la puerta, podemos percibir el encanto de este lugar en cada uno de sus detalles. Martina, nos recibe con una gran sonrisa sin esperar a que lleguemos al mostrador. Al preguntarle por la carta, nos explica que no tienen un menú fijo, pues dependen de las provisiones y los productos de la temporada. Aún así, escucha con atención lo que nos apetece tomar y nos muestra la variada selección de productos homemade que disponen. ¡Nos encontramos como en casa!
Il Tavolo Verde es para venir con tiempo y pasarse la tarde merodeando entre sus muebles. El espacio se dispone según la antigua vivienda taller de la familia broncista que vivía antes en la calle Villalar, 6: en la entrada queda el despacho ahora convertido en una pequeña cafetería y en la parte de la trastienda un pequeño laberinto de antigüedades. El conjunto cobra sentido cuando escuchamos la historia de sus propietarios Leo y Martina, la pareja que decidió crear este proyecto basado en el arte, la decoración y la gastronomía.
De vez en cuando, deciden cerrar el negocio por unos días y echarse a la carretera en búsqueda de reliquias del siglo XVlll y XlX por diversos países. El único criterio que ponen para llevarse a casa los objetos es que tengan valor emocional. Leo, nos cuenta con entusiasmo que el espejo convexo que preside la parte de la cafetería fue cedido por una familia alemana y que anteriormente servía para supervisar la mercancía que descargaban los trenes en un antiguo puerto ruso. Ésta, es tan sólo una de las muchas historias que recoge Il Tavolo Verde y que por supuesto, nos encantan.
Además, trabajan con marcas especiales que siguen su gusto por lo ecológico y artesanal y forman parte de la armonía de su espacio como su rincón de plantas de Fransen et Lafite o la colección de lencería de La Costa del Algodón.
El pasillo hacia la trastienda está repleto de cuentos al alcance de la mano de los más pequeños. Y detrás de la cocina hay un espacio para niños donde pueden leer, hacer los deberes o jugar con las diferentes piezas de madera infantiles.
De la cocina de il Tavolo Verde, que Martina llama cariñosamente “la pecera”, salen deliciosos platos ecológicos de temporada elaborados con ingredientes de huertos familiares de Guadalajara: cremas de verdura, sopas, quiches, ensaladas… Y dulces de todo tipo que dejan sin sentido.
La especialidad de la casa
- Platos de cocina orgánica
Crema de calabaza con leche de coco y jengibre / Crema de pimiento rojo y ricota
Quiche de ricotas, setas o puerros.
- Para beber
Cerveza ecológica: “El Carmen”.
- Y de postre:
Tarta de zanahoria
Desde diciembre, acogen el proyecto “Intervenciones”, donde cada mes un artista invitado dispone del espacio de Il Tavolo Verde para el desarrollo de su obra. Este mes, Lizi Prada aporta proyecciones audiovisuales con su obra “Reflexiones”: por el techo y las paredes del local aparecen reflejos de agua que aportan aún más armonía a este lugar.
Il Tavolo Verde
Calle Villalar, 6 (Madrid).
Metro: Serrano, Banco de España y Retiro.
Horario: de martes a sábado de 10h a 20 h.
Página web: www.iltavoloverde.com