A lo largo de los años, la publicidad ha construido la imagen de las marcas que nos acompañan a diario, haciendo que algunas incluso formen parte de nuestra cultura. Sin embargo, la cultura evoluciona y cambia, y algunos de estos carteles publicitarios que tan cotidianos parecían en su época, hoy serían un escándalo. Repasamos algunos de los carteles publicitarios de nuestro país que hoy no podrían utilizarse a la ligera…
Nocilla
La merienda por excelencia de los niños españoles lleva cuatro ingredientes: leche, cacao, avellanas y azúcar. En este particular cartel de los años 80, la marca quiso retratar cada uno de los ingredientes utilizando a un niño. Al hacer la metáfora del cacao, utilizaron como modelo a una niña bastante más morena que los demás… Sin duda, algo que hoy se llevaría unas cuantas quejas.
Danone
La imagen de familia ha ido siempre muy asociada a las marcas de comida. Los yogures son una parte fundamental para el crecimiento de los niños, y en los años 40, en la familia era la madre quien se encargaba de criar a los hijos. En este cartel de Danone, la figura paterna de la familia no está por ningún sitio, y es que la tarea de alimentar y cuidar de los pequeños, era de la madre. Hoy, la publicidad da muchos pasos para salir de estos roles y un cartel como este sería impensable.
Chiquilín
Para anunciar la energía de sus galletas, Chiquilín decidió utilizar la imagen de dos niños con guantes de boxeo. Uno de ellos está rendido en el ring, y el otro está comiendo una galleta para prepararse para terminar el combate. Teniendo en cuenta la conciencia social que hay actualmente en torno al tema de la violencia juvenil y el acoso escolar, un cartel con dos niños pegándose no augura un buen futuro para una marca. Y más cuando se refleja como una imagen de “los hombres del mañana”.